Haile Selassie I, el Cristo Rey de los Rastafari.
Los seguidores del rastafari, conocidos como
rastas y que no
portan necesariamente dreadlocks, creen que Haile Selassie, liberará a la gente del mundo de
ascendencia africana, conduciéndolos a una tierra prometida llena
de emancipación y justicia divina.
Los rastafaris
[5] creen que ellos, y el resto de la raza negra, son descendientes de los
antiguos israelitas. La suya es una religión abrahámica fuertemente sincrética.
Según cuenta el libro Kebra
Nagast, en el siglo X antes de Cristo, Etiopía fue fundada por Menelik I,
hijo de Salomón y la reina
de Saba, quien había visitado a Salomón en Israel. En
1° Reyes 10:13 se proclama "Y
dióle el rey Salomón a la reina de Saba todo lo que deseaba, pidiera lo
que pidiera, aparte de lo que le dio de su tesoro real. Y así ella
regresó a su país, junto con sus sirvientes". Los rastas interpretan
esto como que ella dio a luz un hijo. Que judíos negros han vivido en
Etiopía durante siglos, desconectados del resto del judaísmo por el
control musulmán de Oriente Medio y del norte de África, es
incontrovertible; se les llama Beta
Israel o
falashas. La existencia de falashas dio cierto crédito e ímpetu al
rastafari inicial, puesto que parecía validar la creencia de que Etiopía
era Zion.
Algunos rastafaris decidieron clasificar a su religión como cristianismo etíope ortodoxo, cristianismo
protestante o judaísmo. De éstos, los lazos a las iglesia etíope
ortodoxa Tewahedo
son los más difundidos, aunque discutidos de forma controvertida en el
clero. Los Rastafaris creen que las traducciones estándar de la Biblia
presentan cambios creados por la estructura racista y eurocentrista
blanca de poder, entonces reverencian el texto épico nacional etíope, el
Kebra Nagast.
Para aclarar más la clasificación del rastafarianismo, uno de sus
tipos de asamblea espiritual (
grounation) es similar en muchas
aspectos a los oficios religiosos judíos,
y puede haber derivado de los esclavos afroamericanos que se
convirtieron al judaísmo -cierto número de judíos en los estados sureños
de los Estados Unidos poseían esclavos- y huyeron a Jamaica
[cita requerida]. Algunas
de las características del rastafarianismo inicial estaban relacionadas
de cerca con las religiones nativas del Caribe y África,
aunque fueron en gran medida purgadas por los guerreros
Nyahbinghi, caracterizados por sus dreads rasta y que
lucharon contra el poder "corrupto" de algunos líderes que añadieron
estos elementos sincréticos a las doctrinas rastafaris
[cita requerida].
Muchos rastas creen que Jah, forma abreviada del nombre de
Dios Yahveh
en las escrituras Hebreas, había tenido tres encarnaciones: Melquisedec,
Jesucristo, y finalmente Haile Selassie, la última expresión de Jah, siendo cada
uno de ellos un "Salvador".
Debido a su alto sincretismo, no hay un estudio general a la cultura
rastafari, pues según ellos cada uno es dependiente de su fe, es decir,
también tienen entre ellos muchas diferencias en su fe.
El movimiento rastafari recibe este nombre debido a su regente (Ras),
que como se anotó al principio, antes de ser reconocido como Haile Selassie I se llamaba Ras
Tafari Makonnen.
Una de las doctrinas más importantes es la del uso opcional del
cannabis (marihuana), ya que ésta es la planta sagrada de los rastafari y
es utilizada para varios usos rituales que podrían llevar a elevar los
pensamientos y a tener una íntima comunión con Jah,
aunque no es utilizada por todos, ya que algunos rastafaris pueden
estar en un estado de meditación con Jah sin tener que utilizar
Marihuana, Cannabis o Ganja aunque no necesariamente se puede asociar a
los rastas con la marihuana.
Dicha planta se utiliza en Etiopía como sacramento de la Iglesia Copta, así como los Católicos toman
hostias, etc. La Marihuana es usada por los Rastafaris, ya que algunos
sostienen que fue encontrada en el lugar de la tumba del Rey Salomón,
donde luego de enterrarlo, en el monte, se encontró al día siguiente una
planta la cual al ser fumada hacía sentir a la gente un contacto
especial. No existe registro certero del descubrimiento y su posterior
uso religioso en el movimiento Rastafari. Desde siempre los aromas están
vinculados con la apertura de conciencia facilitando la conexión
interna; en hebreo "reaj"-aroma, y "ruaj"-espíritu comparten exactamente
la misma raíz. Por lo que los aromas siempre han sido importantes, el
incienso mismo ofrecido por los israelitas a Dios, por parte de los
sacedortes levitas es una prueba más de lo importante que son los aromas
para Dios.